Es primavera y tenemos las condiciones perfectas para una escapada fugaz a Segovia con la autocaravana. Es una ciudad ideal para desconectar del día a día porque te envuelve y transporta a otra época, y combina la magia de su casco antiguo con un entorno natural salpicado de iglesias, monasterios, y edificios históricos.
Lo primero que hacemos al llegar es buscar el sitio para dejar la autocaravana porque nos será imposible movernos con ella por el centro al estar peatonalizado. Por suerte Segovia cuenta con un área de autocaravanas gratuita con servicios de agua potable y vaciado de aguas negras y grises. Está junto a la plaza de toros, en una zona tranquila y bastante próxima al centro de la ciudad, y la estancia máxima permitida es de 72 horas. Además tiene un supermercado a dos minutos. La dirección es Calle Campo Azalvaro y las coordenadas son 40.94083, -4.10778.
Con la autocaravana aparcada es momento de dedicar nuestra atención a la gastronomía local y el cochinillo del conocido restaurante Casa Cándido es una apuesta segura, siempre que hayamos reservado con antelación. Para ir al restaurante caminamos desde el parking unos 15-20 minutos hasta llegar al acueducto, que está situado en la misma plaza, donde además tenemos la Oficina de Turismo.
Ya con el estómago lleno empezamos el recorrido siguiendo la Calle Real, que en este tramo en realidad se llama Calle Cervantes, hasta la Casa de los Picos, famosa por su fachada compuesta por más de 600 picos de granito. Junto a ella podremos ver también el Palacio de los del Río y el Palacio de los de la Torre.
Nuestro camino sigue por la calle Real en el tramo de la Calle Juan Bravo para buscar la iglesia románica de San Martín, situada en una plaza con influencias italianas que incluye varias casas monumentales. Desde aquí nos acercamos a la Plaza Mayor siguiendo la calle Isabel la Católica. Es imprescindible visitar la Catedral de Santa María.
Después de ver la catedral caminamos hacia el Alcázar, otro de los monumentos más importantes de Segovia junto a la catedral y el acueducto. La entrada normal cuesta 5,50 euros e incluye la visita al palacio y el Museo del Real Colegio de Artillería. Es muy recomendable pagar los 2,50 euros de la entrada a la Torre de Juan II y subir sus 156 escalones para disfrutar de una fantástica panorámica del centro histórico.
Una vez visto el Alcázar volvemos hacia el acueducto paseando por el Barrio de las Canonjías, entre las calles Velarde y Daoiz, para conocer uno de los mejores exponentes de la arquitectura románica civil de Europa, y recorremos la Judería por las calles de la Judería Nueva, de la Judería Vieja y de Santa Ana. Al llegar a la Plaza del Corpus visitamos la antigua Sinagoga Mayor de la ciudad. Y finalmente nos acercamos a la muralla para conocer las puertas que se conservan en ella. De vuelta al acueducto lo cruzamos y nos dirigimos por la Calle San Juan hacia la Iglesia de San Juan de los Caballeros para callejear por el Barrio de los Caballeros.
Todo el itinerario del día está en el plano de abajo (incluyendo el camino del parking al acueducto).
Una de las cosas que más nos gusta de Segovia es que conjuga el centro histórico lleno de monumentos con un fantástico entorno natural.
Para descubirlo regresamos al acueducto y desde allí nos dirigimos hacia la muralla para salir al Valle del Clamores por la puerta de San Andrés, donde estaba situada la antigua morería. Siguiendo el valle en dirección Noroeste llegamos al Santuario de la Virgen de la Fuenciscla.
Muy cerca de aquí tenemos el Monasterio de los Padres Carmelitas Descalzos y la Iglesia de la Vera Cruz, muy curiosa por su planta dodecagonal. Siguiendo el valle visitamos el Romeral de San Marcos antes de llegar a la Casa de la Moneda, uno de los edificios históricos industriales más antiguos y donde está situado el Centro de Interpretación del Acueducto.
Terminamos recorriendo hacia el Este el río por la Alameda del Parral para ver los Monasterios de El Parral y de San Vicente el Real. Si hay tiempo antes de volver a la autocaravana podemos seguir la Senda de los Molinos, una zona menos conocida de Segovia pero que resulta muy interesante y nos parece el cierre perfecto para una estancia en la ciudad.
Lo mejor de viajar en autocaravana es que proporciona total libertad para hacer planes sobre la marcha, así que si disponéis de más tiempo os invitamos a que aprovechéis para conocer la provincia segoviana, que ofrece muchísimas posibilidades.